lunes, 25 de agosto de 2014

Jesucristo y Podemos


Jesucristo y Podemos

Por Ernesto A. Rodríguez

A lo largo de la Historia a nombre de Jesús se ha hecho de todo. Desde  las obras más altruistas, hasta crímenes, saqueos, exterminios de pueblos enteros y muchas cosas más. Para muestra un botón.  En Europa el tribunal de la inquisición, con el poder de convencimiento que solo da el fuego,  hizo   entrar en razones a aquellos con dificultades para entender la biblia y comprender que el único camino posible era la iglesia católica. En estos últimos años el hijo de Dios también ha sido secuestrado por algunos líderes populistas y socialistas para dirigir  sus propias cruzadas contra la oligarquía. Chávez, a quien Dios tenga bien lejos, no le faltaba ocasión para  echar manos al crucifijo e invocar a Jesús mientras llenaba sus cárceles de presos políticos y le dedicaba  adjetivos como cavernícola y troglodita a su eminencia el  Cardenal de Caracas. En más de una ocasión insinuó  a sus discípulos que él era la resurrección de  Bolívar y   Jesús era chavista. Así las cosas no podían ir mejor, pensaría. Tanto prendieron sus enseñanzas entre los discípulos que una vez crucificado por el cáncer, su fichaje e hijo adoptivo, además de verle transfigurado en un pajarito, recibió la revelación de algún arcángel; ebrio  supongo yo, de que el finado intercedió ante el todopoderoso para que  le diera una manito  a Jorge Bergoglio en sus aspiraciones de convertirse en Papa. En esto Hugito no siguió el camino de su mentor  Fidel Castro, quien puso  a la curia de la Isla  en peligro de extinción, transformando en estos cincuenta años  muchos templos, primero en escuelas,   después almacenes y posteriormente   en ruinas saqueadas.

 En  una entrevista al diario El Mundo el señor Iglesias tomo notas de  Chávez y expresó  que Jesucristo seria de círculo, o sea de Podemos. Sinceramente hay algo que aquí no cuela. En el nuevo testamento he podido leer que Jesús predicaba sus enseñanzas con amor.  No hay un capítulo donde  incitara a sus seguidores al odio y que se levantaran en armas contra las “Castas” de la época. Ponía aunque parezca raro la otra mejilla a sus enemigos. De hecho en el momento que Judas lo entregara a sus captores en el huerto Getsemaní,   reprimió a Pedro cuando cuchillo en mano desorejó a Malco uno de los malos.  Después de ser golpeado, ultrajado y crucificado, pidió el perdón para sus verdugos. Digo todo esto porque no me imagino a Jesucristo con un grupo de sus colegas del movimiento participando en  un  escrache o acto de repudio como en Cuba,  frente a la tribuna o la casa de un político coaccionando sus   libertades. ¿Enaltecería Jesús a aquellos gobiernos donde se violan los derechos humanos y apoyan a grupos Narcoterroristas como las FAR? Tampoco  lo veo coqueteando   en una herriko taberna  Navarra  con quienes apoyan a esa panda de terroristas que cegaron la vida de muchos españoles, el mismo día que llamaron  a la constitución  “el papelito aquel del setenta y ocho”. Estoy seguro que daría a los más necesitado su salario en lugar de  auto donárselo para otros asuntos…Él si  contestaría sin pensar a Esperanza Aguirre una y otra vez: ¡Los etarras son unos asesinos! y ¡Los Castros son Dictadores!

Por suerte  España no es  Venezuela, donde los listados electorales son menos confiables que los Monederos importados de un Bazar cercano a la Complutense, sino para las próximas municipales en las filas de Podemos votaría además del  Jesús de Pablo Iglesias, un chino en Burgos con el nombre del Cid o una recién llegada africana inscrita en Vizcaya  como Dolores Ibárruri.  Aunque bueno,  con esto  de la memoria histórica   nunca se sabe.

 

No hay comentarios:

Publicar un comentario