miércoles, 3 de septiembre de 2014

Liberen a Willy






Liberen a Willy


Por: Ernesto A. Rodriguez


La verdad que Willy Toledo nunca me ha caído bien. Pienso que maneja su vida como un reality de la telebasura. Para mi es la  Belén Esteban de la izquierda española. Cuando un día  calificó  a los disidentes en las cárceles castristas, como delincuentes y criminales  prometí no hablar más de él. Hoy pediré perdón de rodillas a la poca dignidad que me queda al escribir su nombre, pero prometo mediante severa penitencia reivindicarme.

 A Willy no le importa el momento ni el escenario para lanzarnos a la cara su idolología  y defender como siempre…lo indefendible. Lo que cuenta es estar  en los medios, da igual  lo que digan. En su particular evangelio, en un principio fue el Verbo y el Verbo se hizo Noticia e irremediablemente para él ser parte de ellas  marcó  la diferencia entre  luz y  sombras, la realización y el fracaso. Según las tesis del  artista, España no es una democracia porque la gobiernan los mercados, en cambio Cuba si  porque la gobiernan los Castros  y “son un referente y un símbolo para los pueblos del mundo” además.  “una alternativa para el capitalismo hegemónico”. ¿Qué les parece?.  ¿Quien dice q no hay libertad de expresión en Cuba? En España estamos peor,  pues no solo Intereconomía, La Razón, el Mundo…todos nos mienten, desde el primer al último segundo de un telediario, además  los cubanos si son felices,   tienen educación, y sus hospitales son la repera, olvídate de los de Madrid que están privatizados y no me digan más que me vaya a vivir a la Habana porque un día me largo y…me largo.  A veces trato de entenderlo, pero si a él le gusta que a sus hijos le quiten la leche a los siete años, ganar diez euros al mes, hervir el agua de beber todos los días, hacer largas colas hasta para comprar el  periódico,  o tener que llevar el almuerzo, sabanas, toallas y hasta un calentador  para bañarse en esos hospitales que son un asco, no quiere decir que al cubano de a pie le guste. Pero obviemos este detallito. A nuestro hombre igual  le da echarle tierra al juez Garzón que luego postularlo a presidente, o  llamar en una manifestación del SAT, auténticos ladrones a  los parlamentarios  teniendo a Gordillo, el chico  de Mercadona, a su lado.  Sin embargo lo que está en la palestra es su  reciente tikitiki con el movimiento Podemos. Esta semana  Willy el cabreado,  quien ahora entendió que otros están ocupando las preferencias de la izquierda  y eso no se puede tolerar,  incendió el ambiente al  llamar  a “las hordas reaccionarias de Podemos” y en especial a Pablito; el chavalote de la Tuerka,  cobardes por no defender a Cuba y Venezuela,  acusándolos además de cínicos,  y de querer tomar a los ciudadanos por estúpidos. ¡Qué fuerte!

El hoy residente del  otrora exclusivo barrio  del Vedado es un comunista de  la vieja escuela,  la misma donde unos  años atrás  pidieron la baja Vargas Llosa,  Sartre, Simone de Beauvoir, Juan Goitosolo, además de Heberto Padilla y Virgilio Pinera  quienes fueron expulsados por hablar mal del director. Willy     debe guardar paciencia  y entender que si aun las cabezas de Podemos  no defienden como él desea a esas dos dictaduras y “sus discursos son vacios y faltos de Ideología” no es  por menoscabo, sino que todavía no han pasado las elecciones y necesitan arañar el voto de los indecisos que buscan un cambio, pero temen sea el remedio  peor a la enfermedad. Por lo pronto ya  Monedero lanzó el guante  reprochándole que “sus mapas estaban envejecidos” y lo de siempre “ a nadie piden carné ni enmienda biográfica” Esto recién comienza y en los próximos días, dardos cargados de descalificaciones volarán otra vez de La Habana a Madrid y viceversa. Mientras tanto y a la espera  que un alma caritativa suba rápido Torrente cinco al internet,  separo asiento en primera fila para disfrutar  de este ridículo espectáculo, entre Willy el aguafiestas, quien un día si cumplió y se fue a Cuba y los demagogos que no saben cómo cumplir   tanto que en su programa prometen.
 
 

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